La cebolla es un alimento que ayuda a digerir mejor otros alimentos y que además actúa como limpiador y ayuda a mantener el organismo libre de toxinas. Son también muy conocidos sus beneficios para la circulación sanguínea, la hipertensión, para mejorar problemas respiratorios y para reducir el colesterol.
Cebolla en el embarazo
Sí. La cebolla aporta hierro, fósforo, vitamina E, hidratos de carbono y potasio, y sobre todo, contiene ácido fólico o folatos, una vitamina muy importante durante el embarazo, ya que es fundamental para el crecimiento y el desarrollo correcto del feto desde las primeras semanas de gestación.
Durante el embarazo, es habitual que algunas mujeres tengan antojo de cebolla, mientras que otras no soportan su olor o les produce molestias estomacales. Si éste es tu caso, puedes probar a tomar cebolleta, que es más suave y se tolera mejor.
¿Puedo tomar cebolla cruda en el embarazo?
En principio la cebolla cruda no está contraindicada en el embarazo, pero un consumo excesivo puede producir flatulencia y ardor. Por eso, si eres propensa a tener gases intestinales, te recomendamos que moderes su consumo o que la tomes cocida, ya que es como mejor se digiere. En cambio, si padeces estreñimiento, la cebolla puede ayudarte a combatirlo.