Los espárragos son un alimento muy saludable por su aporte de vitaminas, hierro y fibra, entre otros. Además, son un alimento siempre presente en dietas depurativas y de adelgazamiento debido a sus propiedades diuréticas. La variedad silvestre es conocida como espárragos trigueros, mientas que también se cultivan dando lugar a los espárragos blancos.
Propiedades de los espárragos en el embarazo
Los espárragos tienen numerosos beneficios durante el embarazo, pues aportan nutrientes necesarios tanto para el crecimiento del bebé como para la preparación de la madre para el parto y el amamantamiento. Por eso, son un alimento recomendado especialmente durante el tercer trimestre de embarazo. Su contenido rico en vitamina A, E, selenio, cinc, hierro y betacaroteno protegen el ADN y refuerzan el sistema inmunológico de la madre y el bebé. También contienen enzimas antioxidantes, que junto a las vitaminas del grupo B, ayudan a eliminar toxinas.
Sus propiedades diuréticas, los hacen muy recomendados para mejorar la retención de líquidos en el embarazo, una molestia muy común en esta etapa de tu vida.
Entre las vitaminas del grupo B, los espárragos contienen ácido fólico o folatos, imprescindible para el correcto desarrollo del bebé y para evitar posibles problemas y malformaciones. Finalmente, los espárragos contienen fibra prebiótica, que favorece la presencia de bacterias saludables en el intestino,
Consejos para tomar espárragos durante el embarazo
Los tallos más grandes, gruesos y carnosos son los que contienen más fibra. Lo ideal es comerlos crudos y frescos ya que de este modo conservan todas sus propiedades, aunque cocinados al vapor o a la plancha también conservan la mayoría de sus nutrientes. Los espárragos envasados contienen mucha sal, por lo que su efecto diurético podría disminuir y no serían beneficiosos para evitar la retención de líquidos.
Aprende a cocinar los espárragos